Cuando hablamos del día de San Valentín, todo el mundo piensa en el cariño, el amor, en cosas bonitas, por ello cuando lees u oyes que ha habido un crimen en ese día, parece difícil de creer.
Seguramente todos conoceréis quién es Oscar Pistorius, para quién no, aclarar que es un velocista sudafricano de 30 años que posee las marcas mundiales en las pruebas de 100,200 y 400 metros lisos en los Juegos Paralímpicos de Atenas 2004.
Un 14 de febrero de 2013 fue acusado de asesinar a su novia Reeva Steenkamp, y actualmente se encuentra cumpliendo prisión.
Los hechos ocurrieron la madrugada de San Valentín de ese año, en la que el deportista disparó hasta en cuatro ocasiones a su novia que se encontraba en el cuarto de baño.
Pistorius alegó en todo momento que pensó que era un intruso que había entrado en su casa por la ventana del cuarto de baño, y que pretendía defender a su novia en todo momento.
Esta declaración pierde fuerza cuando vecinos alegan que esa noche escucharon una fuerte discusión entre la pareja, minutos antes de oír los disparos. Incluso investigadores llegaron a admitir que la víctima se encontraba agachada, en posición defensiva y cubriéndose la cabeza cuando recibió los impactos de bala.
El primer agente encargado de llegar a la escena del crimen fue presionado para admitir que la noche del crimen se podían haber contaminado pruebas.
Esto, junto con las imprecisiones del caso, las contradicciones en las declaraciones del supuesto asesino y la ambigüedad en algunos detalles clave para la investigación (como si lleva las prótesis puestas en el momento de disparar o en lugar donde se encontraba la pistola) hacen de este un caso muy complejo.
Pistorius fue condenado en un primer momento a cinco años de prisión por homicidio, del cual sólo pasó uno en prisión, ya que después cumpliría el resto de la pena en su domicilio por buena conducta.
Pero la Fiscalía del Estado recurrió y en diciembre del 2015, el Tribunal de Apelación anuló la primera condena y declaró al deportista culpable de asesinato, condenándole a seis años de prisión.
Siendo esta condena nuevamente apelada por la Fiscalía y el Tribunal la ha aumentado a 13 años y cinco meses de cárcel.