¿De verdad un sentimiento de odio puede llegar a matar a alguien?
¿Qué tan fuerte debe de ser dicho odio para desear y consumar la muerte de varias personas inocentes?
Esta semana voy a hablar de la homofobia y sus consecuencias analizando un caso reciente ocurrido en Canadá.
La homofobia es el término que se emplea para describir el rechazo, miedo, repudio, prejuicio o discriminación hacia mujeres u hombres homosexuales, es decir, que sienten atracción sexual hacia personas del mismo sexo. Bajo esta definición también se engloban los bisexuales y transexuales.
¿Hasta qué punto vivimos en una sociedad homófoba? Según Amnistía Internacional más setenta países persiguen a los homosexuales y ocho hasta los condenan a muerte.
Todos pensamos que en pleno siglo XXI nuestra sociedad ha evolucionado y cada vez más aceptamos esta orientación sexual de las personas, pero no es verdad, puesto que aún existen muchos prejuicios latentes dentro de los seres humanos.
Hoy pongo el ejemplo de Bruce McArthur de 66 años quién “plantó” en decenas de macetas los restos de sus víctimas en la ciudad de Toronto.
Se le conoce como “El jardinero asesino de gays”, y fue arrestado el pasado enero acusado de la muerte de dos personas de 44 y 49 años.
Unos días más tarde, la Policía añadió tres cargos nuevos, los asesinatos de personas de 58, 50 y 47 años.
Han encontrado restos humanos en algunas macetas en casas donde trabajaba y actualmente se encuentran buscando restos humanos en macetas de grandes dimensiones en al menos 30 propiedades en las que había trabajado.
Algunos ya hablan de asesino en serie… ¿Qué opináis?
A continuación os dejo un pequeño documental sobre este tema.